Reportaje
TAUROMAQUIA Y ANTITAUROMAQUIA
La tauromaquia
actualmente es una actividad que es amada por unos, odiada por otros. Al igual
que es defendida por muchos, y por otros hasta incluso es despreciada. Para
muchos esto es arte, tradición y costumbre; para otros, una simple barbarie.
La
Tauromaquia como tradición
La palabra
Tauromaquia nació del idioma griego, que se refiere a la actividad o técnica
que se da para lidiar con toros, y para muchos pertenecientes a este mundo y
fanáticos taurinos, esto va más allá que una simple actividad, como lo refiere
el extorero peruano, Eduardo Carozzi Morales, que describe la tauromaquia como un arte que se da entre el toro y el
torero, y también como una tradición.
Esta actividad
taurina nació en España a mediados del siglo XII y con el paso del tiempo se
fue expandiendo al resto del mundo y una de ellas es nuestro país, Perú. Estos
espectáculos se realizaban en plazas públicas y lugares abiertos como parte de
celebraciones bélicas, patronímicos y fiestas.
Durante los primeros
siglos en que nació la tauromaquia, solo era una actividad exclusiva para los
nobles, pero estos a su vez recibían la ayuda de sus peones. Que con el paso
del tiempo estos se convirtieron en toreros de a pie, quienes se hicieron muy populares
por ser parte del mismo pueblo y ya no
de la nobleza.
En la actualidad, la
actividad más conocida de la tauromaquia y más practicada en el mundo, es la
corrida de toros.
Esta fiesta taurina,
no solo se basa en la corrida de toros, sino, en todo el desarrollo que se da antes,
durante y después del espectáculo. Como la confección y bendición que se da al
traje del torero y demás participantes del espectáculo que se va a dar, así
como las manifestaciones artísticas referidas a la actividad taurina .La
corrida de toros está dividida en tres partes, llamadas tercios, en la cual el
primer tercio es la lidia que se da entre el toro y el torero, en el segundo
tercio, los banderilleros adornan al toro con banderillas, y finalmente, el
tercer tercio, es la muerte del toro. Al término de la faena, recompensan al
torero por su actuación, si el presidente enseña un pañuelo blanco recibe una
oreja como trofeo, así como también se puede enseña un pañuelo verde si el toro
no está apto para torear o un pañuelo naranja para indultar al toro si es de gran calidad.
Los toros que son
usados en este tipo de espectáculos taurinos, son los famosos toros de lidia,
quienes destacan por su pelaje, comportamiento, porte y bravura. Estos tipos de
toros no tienen otro propósito comercial ya que no tiene muy buena calidad en
lo que es carne y leche.
Tauromaquia en el
Perú:
De los cinco países,
Latinoamérica donde se practica estas actividades taurinas, el Perú viene a ser
el cuarto país más taurino.
La tauromaquia se
viene realizando en el Perú, por casi 500 años. Todo comenzó desde la llegada
de los españoles a nuestro territorio peruano. Ya en el virreinato del Perú, la
actividad taurina empezó a tomar más popularidad. Al igual que en España, la
lidia de toros comenzó en las plazas de la cuidad, que serian en este caso, la
plaza mayor, al igual que las casonas de Santa Anita y San Francisco, donde se
realizaban este tipo de fiestas.
Muchos peruanos creen
que la primera plaza de toros fue la plaza de Acho, pero, no fue así, la verdad
es que la primera plaza de toros fue la plaza de armas de Lima, donde Francisco
Pizarro fue la primera persona en torear toros de lidia. Según los archivos de
lima, Pizarro comenzó a torear en 1538, en lo que hoy en día serian los patios
de palacio. Como ya habíamos mencionado anteriormente, esta actividad solo era practicada
por los nobles e hijos Dalgos del virreinato, quienes se enfrentaban al toro
con lanzas y rejones (varas de madera con cuchillas de acero) para mostrar su
valentía y la destreza que tenían a caballo en situaciones de combate.
Los días en que se
realizaba espectáculos taurinos, La Plaza de Armas se preparar para este show,
en primer lugar, todas la calles eran cerradas con galerías llamadas, palcos
preferenciales, para que las instituciones de lima, como las religiosas, puedan
divisar el espectáculo, en segundo lugar, al costado de la catedral se armaba
un toril, donde se encontraba el alcalde y en los balcones se encontraban las
principales autoridades de ese entonces. La fiesta comenzaba con el despejo que
hacían las milicias para que el ruedo quede libre e inmediatamente un aguacil a
caballo, atravesaba la plaza llevando una llave de oro a los llamados,
corredores de llave, y estos a su vez, le entregaban la llave al alcalde para
que abriera simbólicamente el portón para que salieran los toros.
La fiesta de toros da
un cambio radical con la elaboración de un coliseo para este fin, a mediados
del siglo XVIII.
Antes de la construcción
del coliseo, se había armado una plaza desmontable es un lugar llamado el
hacho, donde se podía divisar el mar, y es de ahí donde nace el nombre del
principal coliseo de toros de Perú. Hasta que con el permiso del Virrey Amad,
se pudo construir una plaza de toros fija en 1766, que hoy en día viene a ser,
la plaza de Acho, ubicada en Rímac. Actualmente en el Perú existen 18 plazas de
toros importantes.
Plaza de Acho – Rímac
En el Perú, los toros
de lidia son criados en haciendas, en total naturalidad, ya que no es una
especie cualquiera, es un animal de pura casta, que ataca desde las primeras
horas de nacido y no mide el tamaño de su agresor.
Algo que ha sido y es
típico en el Perú respecto a la tauromaquia, es la suerte nacional, que
consiste, en salir dos jinetes a caballos criollos o caballos de paso, para
poder quitarle un poco de fuerza al toro para que el torero a caballo pueda
continuar con la corrida, el fin de esta suerte nacional, era bajar el numero
de caballos muertos.
Una de las mujeres
más famosa en el mundo taurino fue Juana de Brein, inmortalizada por Ricardo
Palma como, Juana la marimacho, fue una de las primeras mujeres que realizo la
suerte nacional.
En 1947 se creó el
escapulario de oro del Señor de los Milagros, donde se premiaba al mejor torero
de la temporada, uno de ellos fue Adolfo Rojas más conocido como “El Nene”,
quien además fue maestro y mentor del ex torero Eduardo Carozzi.
“Ser torero es una profesión
riesgosa donde tanto como el toro y el torero corren el riesgo de perder la vida”,
menciona la esposa de extorero Eduardo Carozzi, quien también dice que cuando
formas parte de este mundo taurino es inevitable no dejarlo, ya que se vuelve
una afición, pero que al igual respeta el pensamiento de las personas que está
en contra de esta actividad, como espera que esas personas respeten su opinión.
Hoy, la industria
taurina organiza aproximadamente 377 corridas de toros por año, en los
departamentos donde más se realizan esta actividad son: Cajamarca, Ancash y lima.
No a la corrida de toros
La antitauromaquia es el rechazo hacia las actividades taurinas que se
da en el mundo, conformada principalmente por los defensores de los animales.
Esta organización nace con el surgimiento de estas fiestas taurinas, “ya que
están en contra de los espectáculos que con lleve la crueldad y el maltrato
hacia los animales”, menciona una representante de esta organización.
Actual logo de la asociación Perú Antitaurino
Las manifestaciones
antitaurinas empezaron desde siglos atrás, comenzando por las instituciones
religiosas.
Luego ya a mediados
del siglo XVIII, las corridas de toros seguían recibiendo muchas críticas por
parte de la aristocracia afrancesada, tomaba esta actividad como un apto
indigno por lo que también prohibieron su ejercicio a sus cortesanos. Y es por
eso que solo consintieron, en esa época, las corridas a cambio de que todo lo
recaudado, sea destinado para obras de caridad como hospitales y hospicios.
Pero a pesar de eso
volvieron a prohibir la corrida de toros, pero el pueblo hizo caso omiso a este
mandato y es ahí donde el famoso, Francisco de Goya realizo su serie de
grabados y pinturas de la Tauromaquia. Y es así como todos los gobernantes
intentaban prohibir esta actividad y nunca lograron hacerlo.
A esta organización,
también se suman los ilustres en todo el mundo principal mente los de Europa,
donde reducían la fiesta en sangre, crueldad y porquería. Los detractores de
esta actividad a variado con el paso del tiempo, pero el objetivo de acabar con
este apto sigue siendo el mismo.
En la actualidad, la
organización antitaurina crece cada día más, con la ayuda de organizaciones
contra el maltrato animal, que se unen y tratan de hacer una cadena, para
concientizar a las personas a favor de estas actividades taurinas. Ya que para
ellos esto no es considerado como cultura, ni como artística y deportiva, sino
todo lo contrario, que es una forma de tortura y reduce el valor que se asigna
a la vida de estos seres. Cada año se realiza protestas en diferentes países, contra
la corrida de toros y toda actividad que implique el maltrato hacia los animales.
Antitauromaquia en el
Perú
En el Perú, existe la
organización Perú Antitaurino, conformada por diferentes organizaciones que
defienden los derechos de los animales, organizaciones sociales, ecologistas,
espiritistas y miles de ciudadanos antitaurinos, quienes velan por los animales
, la integridad moral y psíquica de la ciudadanía.
La campaña Fuerza
toros, creada por Animales Libres de Crueldad y Opresión (ALCO) presento el año
pasado un proyecto de ley donde prohíbe el maltrato y sacrificio de animales en
espectáculos públicos y privados, esta fue una de las primeras iniciativas que
se dio para lucha contra la tauromaquia, ya que un gran porcentaje del pueblo
peruano, pide un Perú más civilizado, sin corrida de toros ni crueldad hacia
estos animales. La organización Perú Antitaurino presentó
“campaña nacional de firmas por un Perú antitaurino”, con motivo de que el Congreso
Peruano actué ante su pedido de abolición de esta actividad en nuestro país.
Así como cuentan con
el apoyo de diferentes agrupaciones en defensa animal del
país, también cuentan con el apoyo de algunos congresistas, como Luis Galarreta,
quien lanzo la campaña “Infancia sin violencia”, cuyo fin es prohibir el
ingreso de menores de edad a este tipo de espectáculos de crueldad y también la
práctica de esta actividad por dichos menos y adolescentes. También, se cuenta
con la campaña “Recuperemos la compasión”, que trata de sensibilizar de una u
otra forma a las autoridades religiosas.
Y es así, como estas
agrupaciones tratan cada día de combatir contra esta actividad taurina, para
poder tener un país más civilizado.
Por: Milagros Carrera Orbe
